En 1921, James Biggs, un fotógrafo de Bristol, Inglaterra, quedó ciego después de un accidente. Como no se sentía cómodo con el tránsito de la zona donde residía, pintó su bastón de color blanco para que fuera más visible.
En los Estados Unidos, la introducción del Bastón Blanco se atribuye al León George A. Bonham (Club de Leones de Peoria). En 1930, observó a un hombre ciego tratando de cruzar la calle con un bastón negro que casi pasaba inadvertido para los motoristas en contraste con el pavimento oscuro. Los Leones se ofrecieron a pintar el bastón de color blanco para que se pudiera ver mejor. Para el año 1931, el Club de Leones de Peoria aprobó el proyecto y así se fabricaron y distribuyeron los bastones blancos. El Consejo Municipal de Peoria adoptó una ordenanza mediante la cual se les daba preferencia de paso a los usuarios de bastones blancos. Las noticias sobre la actividad del club se transmitieron a otros clubes y el bastón blanco cobró notoriedad entre videntes y no videntes como un medio de identificación de las necesidades de movilidad sin riesgos para las personas con problemas visuales. En 1931, la Asociación Internacional de Clubes de Leones comenzó a promover el uso de bastones blancos entre los ciegos.
Durante ese mismo año, en Francia, Guilly d'Herbemont reconoció el peligro que corrían las personas ciegas frente al tránsito y lanzó un "movimiento nacional del bastón blanco" para ciegos. Guilly donó 5000 bastones blancos en París.
Si bien el bastón blanco está ampliamente aceptado como un "símbolo de la ceguera", varios países poseen diferentes reglamentaciones sobre lo que constituye un "bastón para ciegos". En el Reino Unido, por ejemplo, el bastón blanco indica que la persona que lo usa tiene problemas visuales. Si el bastón tiene dos bandas rojas, significa que el usuario es sordo-ciego. En algunas regiones, el bastón es amarillo.
Celebración a nivel internacional
En 1970, el Director de la Federación Internacional de Ciegos declaró al 15 de octubre como el "Día Internacional del Bastón Blanco".
El decir de un usuario
Cuando yo lo uso, veo por dónde voy.
Cuando usted lo ve, puede facilitar mi camino.
El bastón blanco que emplean las personas con ceguera sirve para detectar obstáculos y evitarlos, pero no tiene sólo esa función. También identifica al portador como una persona que tiene alguna limitación visual. El bastón blanco le sirve a usted que lo está viendo, para actuar ya sea ofreciendo su ayuda, anunciando algún peligro, o acercándose a preguntar si la persona con bastón blanco requiere algún tipo de información.
El bastón blanco no indica necesariamente que exista un problema motriz, sino que señala algún grado de dificultad en la visión.
El bastón blanco es una herramienta con la que una persona ciega puede movilizarse, tantear el terreno a su alrededor, y avanzar con seguridad. Brinda autonomía a quien lo utiliza, y le permite desplazarse en forma independiente.
Hoy en día son muchas las herramientas que facilitan la vida cotidiana de personas con problemas visuales. La tecnología ha colaborado ampliamente, desarrollando adaptaciones parlantes para que personas con ceguera puedan operar una computadora, y manejar dispositivos parlantes en relojes, calculadoras y teléfonos celulares.
Gracias a la tecnología otros recorridos son posibles, transitemos juntos el camino de la inclusión de personas con problemas visuales
En los Estados Unidos, la introducción del Bastón Blanco se atribuye al León George A. Bonham (Club de Leones de Peoria). En 1930, observó a un hombre ciego tratando de cruzar la calle con un bastón negro que casi pasaba inadvertido para los motoristas en contraste con el pavimento oscuro. Los Leones se ofrecieron a pintar el bastón de color blanco para que se pudiera ver mejor. Para el año 1931, el Club de Leones de Peoria aprobó el proyecto y así se fabricaron y distribuyeron los bastones blancos. El Consejo Municipal de Peoria adoptó una ordenanza mediante la cual se les daba preferencia de paso a los usuarios de bastones blancos. Las noticias sobre la actividad del club se transmitieron a otros clubes y el bastón blanco cobró notoriedad entre videntes y no videntes como un medio de identificación de las necesidades de movilidad sin riesgos para las personas con problemas visuales. En 1931, la Asociación Internacional de Clubes de Leones comenzó a promover el uso de bastones blancos entre los ciegos.
Durante ese mismo año, en Francia, Guilly d'Herbemont reconoció el peligro que corrían las personas ciegas frente al tránsito y lanzó un "movimiento nacional del bastón blanco" para ciegos. Guilly donó 5000 bastones blancos en París.
Si bien el bastón blanco está ampliamente aceptado como un "símbolo de la ceguera", varios países poseen diferentes reglamentaciones sobre lo que constituye un "bastón para ciegos". En el Reino Unido, por ejemplo, el bastón blanco indica que la persona que lo usa tiene problemas visuales. Si el bastón tiene dos bandas rojas, significa que el usuario es sordo-ciego. En algunas regiones, el bastón es amarillo.
Celebración a nivel internacional
En 1970, el Director de la Federación Internacional de Ciegos declaró al 15 de octubre como el "Día Internacional del Bastón Blanco".
El decir de un usuario
Cuando yo lo uso, veo por dónde voy.
Cuando usted lo ve, puede facilitar mi camino.
El bastón blanco que emplean las personas con ceguera sirve para detectar obstáculos y evitarlos, pero no tiene sólo esa función. También identifica al portador como una persona que tiene alguna limitación visual. El bastón blanco le sirve a usted que lo está viendo, para actuar ya sea ofreciendo su ayuda, anunciando algún peligro, o acercándose a preguntar si la persona con bastón blanco requiere algún tipo de información.
El bastón blanco no indica necesariamente que exista un problema motriz, sino que señala algún grado de dificultad en la visión.
El bastón blanco es una herramienta con la que una persona ciega puede movilizarse, tantear el terreno a su alrededor, y avanzar con seguridad. Brinda autonomía a quien lo utiliza, y le permite desplazarse en forma independiente.
Hoy en día son muchas las herramientas que facilitan la vida cotidiana de personas con problemas visuales. La tecnología ha colaborado ampliamente, desarrollando adaptaciones parlantes para que personas con ceguera puedan operar una computadora, y manejar dispositivos parlantes en relojes, calculadoras y teléfonos celulares.
Gracias a la tecnología otros recorridos son posibles, transitemos juntos el camino de la inclusión de personas con problemas visuales